¿Debería invertir en un escáner térmico?

Con el desarrollo de la epidemia, cada vez más empresas necesitan abrir sus operaciones normales. En este momento, el escáner térmico puede ayudar a estas empresas a realizar sus operaciones diarias de forma más segura.

La tecnología utiliza cámaras infrarrojas que pueden detectar la temperatura elevada de la piel a distancia, de forma rápida y precisa. La fiebre es un síntoma conocido de COVID-19.

Los escáneres se colocan estratégicamente cerca de las entradas de los edificios por las que deben pasar empleados, visitantes, contratistas o clientes. Dependiendo de la preferencia del usuario, se activa una alarma sonora o visual cuando se detecta una temperatura más alta de lo normal. Se envía una alerta a través de un sistema en línea al supervisor designado, evitando el costo de que un empleado verifique las temperaturas manualmente.

Un escáner térmico no es un dispositivo médico. No puede detectar el COVID-19 ni garantizar que ninguna persona portadora del virus ingrese al lugar de trabajo. Un estudio de más de 30.000 personas mostró que sólo el 12 por ciento de los infectados tenía fiebre de 100 grados o más. Además, hasta el 45 por ciento de las personas con COVID-19 no presentan síntomas pero siguen siendo contagiosas.

No obstante, los escáneres térmicos pueden resultar útiles si es necesario examinar a grandes multitudes de personas al mismo tiempo—como en aeropuertos, eventos deportivos, conciertos o plantas de procesamiento de alimentos. Los escáneres también pueden ser una primera línea eficaz de detección en cualquier lugar de trabajo cuando se combinan con otros controles, como hacer que los trabajadores completen cuestionarios sobre factores de riesgo antes de ingresar al lugar de trabajo y transmitir mensajes consistentes de que los empleados deben quedarse en casa si se sienten enfermos.

Para las empresas más pequeñas, recomendamos un "escáner térmico" de $400 para realizar una detección una a la vez. Otros escáneres pueden comenzar en $1500.

Cómo funciona

Generalmente se recomienda colocar el escáner térmico en la entrada, como un guardia de entrada. Nuestro nuevo escáner térmico también tiene una función de desinfección, para que los empleados puedan desinfectarse las manos mientras miden la temperatura.

Antes de que todo esto suceda, los empleadores deben desarrollar un plan sobre cómo proceder si se identifica una temperatura alta. Si se desea, se puede cerrar automáticamente una puerta de entrada antes de que llegue un miembro del personal.

Se recomienda un segundo control de temperatura para cualquier persona que esté marcada. La lectura posterior debe ser a través de un método diferente y en otro lugar apartado de los demás y donde se puedan responder dudas en privado.